FOCUS ON

Una garantía llamada Plástico Segunda Vida

|

Aproximadamente 25,8 millones de toneladas: es la cantidad de residuos de plástico que se generan cada año en Europa. De ellos, menos del 30% se recogen para su reciclaje.

Aproximadamente 25,8 millones de toneladas: es la cantidad de residuos de plástico que se generan cada año en Europa. De ellos, menos del 30% se recogen para su reciclaje. La situación se agrava aún más si se tiene en cuenta que las tasas de descarga en vertederos y de incineración siguen siendo demasiado elevadas, un 31% y un 39% respectivamente.

Aumentar el reciclaje de plásticos ayudaría a reducir las emisiones de gases de efecto invernadero y la dependencia de los combustibles fósiles: se calcula que el uso de una tonelada de plástico reciclado reduce las emisiones de CO2 en 2 toneladas en comparación con el uso de la misma cantidad de plástico virgen, el proceso de reciclaje es de hecho menos impactante que la extracción y el procesamiento de los combustibles fósiles. Asimismo, el reciclaje de los residuos de plástico producidos en todo el mundo supondría un ahorro energético anual de 3.500 millones de barriles de petróleo.

 

El desafío asumido por TTS

El uso de plástico recicladoreduce las emisiones de CO2 durante la producción en un tercio en comparación con las generadas con el polipropileno virgen, cuyo impacto es ya ocho veces menor que el del aluminio, una vez menos que el del acero inoxidable y la mitad que el del hierro cromado. La elección de las materias primas es, por tanto, crucial y puede aportar indudables ventajas en términos medioambientales. TTS lo sabe bien y desde 2012 utiliza plástico reciclado de primera calidad, un material de bajo impacto que conserva la coloración tradicional y garantiza la misma eficacia, robustez y durabilidad que los productos fabricados con polipropileno virgen de primera calidad.

El compromiso de TTS con la responsabilidad medioambiental se ha traducido a lo largo del tiempo en una amplia gama de productos con componentes de plástico de segunda vida (PSV) certificados. La gama especial incluye carros multiusos ligeros y duraderos, caracterizados por la posibilidad de crear innumerables configuraciones según las necesidades específicas, y carros con prensa prácticos y compactos, ideales para la limpieza de todos los entornos medianos y pequeños. La gama también incluye cubos disponibles en diferentes capacidades y colores, así como numerosos contenedores fáciles de limpiar, duraderos y visualmente agradables, con tapas de colores para la gestión de residuos. En particular, los contenedores de las líneas Max y Derby representan el buque insignia en la perspectiva sostenible, ya que están fabricados con un 97% de plástico reciclado. Los productos de plástico de TTS también son sostenibles al final de su vida útil: el polipropileno utilizado en su producción los hace totalmente reciclables, lo que contribuye a reducir aún más su impacto en el medio ambiente.

 

Apoyarse en una certificación autorizada

El uso de materias primas recicladas es un paso importante hacia la sostenibilidad medioambiental: TTS ha optado por hacer un compromiso concreto en esta dirección, y ahora ofrece más de 150 artículos de plástico reciclado certificados como Plástico Segunda Vida.

La prestigiosa etiqueta emitida por el Instituto para la Promoción del Reciclaje de Plásticos (IPPR) tras un largo y exhaustivo proceso de verificación hace que los materiales y productos obtenidos a partir del reciclaje de residuos plásticos sean fácilmente identificables, garantizando la máxima transparencia al decretar su sostenibilidad y bajo impacto ambiental.

A diferencia de las simples autodeclaraciones que no ofrecen ninguna garantía al consumidor, la certificación Plástico Segunda Vida aplica la norma internacional ISO 14021 para el cálculo del contenido reciclado, garantizando la calidad de los plásticos reciclados y su trazabilidad según la norma EN 15343.

También prevé una vigilancia anual por parte del organismo de certificación para garantizar el cumplimiento a lo largo del tiempo de los requisitos para mantener la marca.

Por tanto, la etiqueta PSV protege a los consumidores sobre la sostenibilidad real de los plásticos reciclados, permitiéndoles hacer una elección informada en favor del medio ambiente.